Parroquia Santa Inés, Virgen y Martir

La Parroquia Santa Inés nace gracias a la acción del padre Enrique Röling de la parroquia Todos los Santos y Ánimas. Un día, a principios del siglo XX, realizaba su trabajo pastoral en lo que se conoce como Asilo Garrigós (Hogar de Niñas Boado de Garrigós).

Recorría las calles vestido con su sotana y fue atacado con piedras por unos chicos. Lejos de enojarse comprendió que era el momento que esa zona de la ciudad contara con ayuda espiritual. Entonces compró una parcela de tierra en Ávalos 260 donde se puso una gran carpa que funcionó como centro misional. El 30 de Agosto de 1930, inauguró la capilla del Sagrado Corazón de Jesús. Un terreno pequeño, algunos bancos y un altar de madera. Con chapas de zinc se construyeron tres cuartos. Uno para la sacristía, otro para las reuniones y un tercero donde vivían los caseros.

Parroquia Santa Inés la historia

Al ser erigida en parroquia fue confiada a los religiosos Camilos. Desde el 5 de mayo de 1932, hasta el 9 de julio de 1972, en que pasó al clero secular. Permitiendo así que los religiosos se dedicaran por entero a los enfermos.

En enero de 1942 se inauguraron las obras de ampliación de la Parroquia Santa Inés. Se comenzó el año anterior con la construcción del coro y la escalera que da al mismo. Luego, a continuación del edificio existente, se levantó un nuevo cuerpo. Compuesto de crucero, presbiterio y sacristía. En conjunto miden 15 metros de largo, por 10 de ancho. En los laterales se colocaron dos grandes vitrales. Dedicados, el de la derecha a San Camilo, y el de la izquierda a Santa Inés. Se elevó y embelleció la fachada. Se construyó el Bautisterio, el salón para reuniones, y frente al mismo, una pequeña habitación destinada a la portería.

Hacia el año 1980 se volvió a remodelar internamente la Parroquia Santa Inés. Para una mejor adaptación a las normas y celebraciones vigentes luego del Concilio. Comenzaron los trabajos en el presbiterio, simplificando la presencia de imágenes. Reubicando el Santísimo en el altar lateral de San Camilo. Se bajó y alargó la mesa del altar central, se hizo el ambón y en el ábside la sede y un revestimiento de madera.

Se sacaron los comulgatorios. El altar de la Virgen de la Salud. Se reubicó la imagen de la Virgen de Lujan con una nueva base en el lugar que ocupaba el confesionario. Se habilitó como confesionario la entrada derecha del presbiterio.

Belleza interior

A la izquierda del presbiterio está el altar consagrado al Sagrado Corazón de Jesús. A la el derecha San Camilo. Arriba de ellos están los vitrales que hicimos referencia mas arriba. Hay muchas hornacinas. A la izquierda de la nave única vemos a Santa Rosa de Lima, San Roque, Santa Teresita del Niño Jesús y San José. La última imagen es  la de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa.

Parroquia Santa Inés

A la derecha están las representaciones de San Antonio de Padua y de San Luis Gonzaga. Respecto a esta última, el 24 de junio de 2007 el Padre Alejandro Pardo efectuó la bendición de la efigie que fue entronizada en el templo. Este santo es patrono de la juventud cristiana. Este lateral finaliza  con el altar privilegiado de la Virgen de la Salud. Es la protectora de la Orden camiliana. El cuadro es la reproducción de uno existente en la iglesia de Santa María Magdalena, en la casa madre de la Orden en Roma.

En 2003 se entronizó un cuadro de la Virgen que Desata los Nudos. Tambien se entronizó la imagen del Padre Pio de Pietralcina, pero en 2007.

El segundo domingo de septiembre Santa Inés recibe la visita de los fieles devotos de la Virgen del Castañar. La colectividad de la Sierra de Bejer, en Salamanca. Son feligreses de distintos barrios de la Ciudad. La Virgen del Castañar está en la capilla del Santísimo. A la derecha del presbiterio, detrás del altar de San Camilo.

Representación de Santa Ines

En arte santa Inés viene generalmente representada con la palma del martirio y un cordero. La asociación del cordero con Santa Inés, en realidad no ha quedado bien clara. Según la tradición, algunos dicen que esta asociación vendría de la confusión de la lectura de su nombre “Agnes” (Inés) y “Agnus” (cordero). Otros afirman, que es debido al modo en que fue martirizada, degollada como un cordero.